Largos meses pasaron desde que el sector inmobiliario de China entrara en una aguda enfermedad, pero justo ahora las autoridades lo quieren revivir. Según el portal Bloomberg, personas relacionadas con los hechos ofrecieron detalles de la nueva cesta de medidas que prepara Pekín.
El fracaso de las políticas existentes en mantener la recuperación del sector obliga a las autoridades a dar pasos adicionales. En consecuencia, los encargados de estas medidas estarían considerando eliminar los pagos iniciales en algunos vecindarios no centrales de las principales ciudades. A esto se suma la posible reducción de las comisiones de los agentes en las transacciones.
Otra medida interesante sería la del mayor relajamiento para las restricciones para las compras residenciales bajo la guía del Consejo del Estado. Según el citado portal, las personas que ofrecieron estas informaciones pidieron no ser citadas dado que se trata de un asunto privado. De cualquier modo, el gobierno parece utilizar toda su influencia para estimular ese mercado.
Medidas radicales para revivir el sector inmobiliario de China
Teniendo en cuenta las tormentas que azotan a la economía china desde hace meses, revivir el mercado inmobiliario requiere medidas especiales. Cabe destacar que el paquete de ayuda del año pasado no tiene los efectos deseados. Sin embargo, las medidas que se preparan contemplarían la actualización y radicalización de algunas contempladas en 2022.
Cabe destacar que en ese paquete se incluyeron 16 medidas extraordinarias dirigidas a estimular el mercado de compra y venta de viviendas. En todo caso, los planes actuales están pendientes de finalización, por lo que los puntos descritos arriba están sujetos a cambios, dijeron las fuentes.
El citado portal intentó contactar con el ministro de viviendas del país asiático, pero no recibió respuesta. No debe perderse de vista que este tipo de medidas son manejadas con hermetismo por parte de las autoridades. En consecuencia, las filtraciones de este tipo suelen no ser bien recibidas. Sea como sea, todo apunta a que las autoridades reconocen implícitamente el fracaso de los intentos de reanimar el mercado.
Revivir el sector inmobiliario se convierte en un desafío para las autoridades debido al largo tiempo desde que comenzaron los problemas. De tal modo, mientas más pasen los meses, mayor es el nivel de desconfianza entre los consumidores. Aunque el mercado se las ha ingeniado para no entrar en contracción, la fórmula para salir del atolladero se tornó esquiva.
El mercado de viviendas es un lastre para la economía china
Esa situación de no terminar de caer ni tampoco dar señales de recuperación pesa fuertemente sobre la segunda economía mundial. Históricamente, el sector inmobiliario es uno de los principales motores de todos los indicadores económicos de Pekín y ahora está jugando en contra. Las autoridades tienen la urgencia de poner punto y final a esta situación y eso hace pensar de medidas fuertes.
Esta necesidad se hace más apremiante teniendo en cuenta que el mercado residencial da renovadas señales de debilidad. En ese sentido, el repunte en la venta de viviendas en mayo se desaceleró notablemente y se colocó en +6,7%. Para tener una idea del retroceso, se debe comparar con el +29% de los dos meses inmediatamente anteriores.
Es importante no perder del radar que la recuperación económica de China perdió impulso durante el mes de abril. La explosión en el mercado de consumo se enfrió a finales del mes y las preocupaciones se apoderaron de los indicadores. La manufactura tuvo un notable estancamiento y se teme que esa tendencia se mantenga los próximos meses. Según expertos de Bloomberg, el PIB tendrá un crecimiento del +5,5% para finales de año. Esto último representa una rebaja desde la proyección anterior del +5,6%.
Frente a un escenario negativo, las autoridades desean revivir el sector inmobiliario para recuperar espacios perdidos durante los últimos trimestres. Se espera que las medidas, de ser aplicadas como se menciona arriba, impulsen la demanda. No obstante, también podrían traer desmotivación a los constructores.
El laberinto del mercado de viviendas
Si hay algo que no se puede negar, es que las autoridades de China hacen lo posible por rescatar el sector inmobiliario. Sin embargo, las fuertes apuestas no han dado sus frutos hasta ahora. Aunque las enérgicas medidas adoptadas en el paquete del año pasado tenían el mejor prospecto, la deuda de los desarrolladores fue más contante de lo que se suponía.
Se trata de una montaña de deuda que equivale a nada menos que al 12% del PIB de esa superpotencia económica. Esa gran cantidad estaría en riesgo impago, lo cual representa una bárbara amenaza para la estabilidad financiera del país comunista. Esta es precisamente la fuente de las preocupaciones y de las decididas medias que aplican las autoridades.
Por ejemplo, en la ciudad de Qingdao, las autoridades redujeron las tasas de pago inicial para los compradores de viviendas por primer y segunda vez. Esta inusual medida muestra hasta qué punto el gobierno desea que suba la demanda de bienes raíces. Pero todos estos esfuerzos hasta ahora son en vano. Las hipotecas continúan en descenso, lo que evidencia el debilitamiento del sentimiento de los consumidores.
Como se puede apreciar, revivir el sector inmobiliario costará al gobierno unos cuantos dolores de cabeza, sobre todo después del tiempo perdido desde que comenzó la crisis. Recientemente, Evergrande afirmó que enfrenta más de mil demandas por los ¥350 mil millones de yuanes en obligaciones no concretadas.