El gobierno Venezolano es acusado de múltiples delitos internacionales. Tanto crímenes de lesa humanidad, como violaciones a los derechos humanos. Sin embargo, ninguna medida de presión se tomó por la región, hasta que Estados Unidos aplicó una serie de sanciones económicas al gobierno. Reduciendo su tránsito de buques petroleros a 0. Sin embargo, Venezuela reanudó el envío de petróleo a China, sin que las sanciones se levantaran.
Siendo uno de los países más observado y sancionado de la región, Venezuela ha tenido que lidiar con un bloqueo marítimo. Uno que redujo drásticamente el flujo de buques petroleros en el país. Ya que, el que fue en el pasado uno de los países petroleros más relevante del mundo, ahora debe comprar petróleo del extranjero. Esto al no ser capaz de explotar sus propias reservas.
Así mismo, su demanda de petróleo proviene de países que tienen a comprar el barril a precios verdaderamente bajos. Como es el caso de China, uno de sus principales comerciales. Por ello, Venezuela reanudó el envido directo de petróleo al gigante asiático.
Venezuela reanuda su exportación de petróleo, pese a que las sanciones no han sido revocadas
El país latinoamericano reanudó los envíos directos de petróleo a China. Esto después de que las sanciones de Estados Unidos detuvieran y persiguieran el comercio clandestino que salía del país, durante más de un año. Esto según datos de seguimiento de embarcaciones de Refinitiv Eikon y documentos internos de la empresa estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA).
Las empresas estatales China National Petroleum Corp (CNPC) y PetroChina, que han sido durante mucho los principales clientes de PDVSA, dejaron de cargar crudo y combustible en los puertos venezolanos en agosto de 2019. Esto después de que Washington extendiera sus sanciones a PDVSA para incluir a las empresas que comercian con la firma estatal venezolana.
De esta manera, la imposición de las sanciones fue parte de un impulso de la administración Trump para derrocar al presidente venezolano Nicolás Maduro. Sin embargo no lograron detener por completo las exportaciones de petróleo de la nación sudamericana ni aflojar el control de Maduro sobre el poder.
En cambio, los clientes de PDVSA impulsaron los envíos a Malasia. Donde las transferencias de cargamentos entre embarcaciones en el mar han permitido que la mayor parte del crudo venezolano continúe fluyendo hacia China. Después de cambiar de manos y utilizar intermediarios comerciales.
Finalmente, PDVSA, CNPC, PetroChina y el Ministerio de Petróleo de Venezuela no respondieron a las solicitudes de comentarios.
Un portavoz del Departamento del Tesoro de EE. UU. dijo el miércoles que «quienes participan en actividades en el sector petrolero venezolano se exponen al riesgo de sanciones».
Las empresas chinas han permitido un puente con Venezuela
El primer petrolero en reanudar el transporte de crudo venezolano directamente a China fue el Kyoto. Fue identificado por el servicio de monitoreo de envíos TankerTrackers.com. Esto mientras cargaba 1.8 millones de barriles de crudo pesado en el puerto de Jose de Venezuela a fines de agosto.
De esta manera, Wanneng Munay forma parte de un grupo de más de una docena de empresas registradas en Rusia. Aunado a esto, no tienen experiencia previa conocida en el comercio de petróleo. Y aun así han surgido como clientes de PDVSA en los últimos meses.
El surgimiento de estas firmas ha permitido a PDVSA continuar enviando petróleo a destinos asiáticos en los últimos meses a pesar de los retiros de clientes establecidos como Reliance Industries de India y Tipco de Tailandia después de que el Tesoro de Estados Unidos puso fin a sus exenciones a las sanciones.
Finalmente, Monte Nero Management SA, operador del Kyoto, no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios. Esto según informes de Reuters.
El futuro de las sanciones con el gobierno de Biden
Los envíos directos se producen antes de la transición de poder en enero en Estados Unidos del presidente republicano Donald Trump al presidente electo demócrata Joe Biden. Pues sus asesores han dicho que mantendrá las sanciones, pero cambiará el enfoque de la estrategia estadounidense.
Esto ha sido una de las mayores preocupaciones de los venezolanos en Estados Unidos, sobre la decisión de Biden de retomar negociaciones con Nicolás Maduro. Pues, se teme que estas sanciones terminen siendo levantadas a largo plazo.
Por otra parte, la reanudación de las importaciones directas por parte de China se produce después de que Washington, a principios de este año, tomara medidas contra las unidades de Rosneft de Rusia. Y luego persiguió a las empresas navieras que continuaron haciendo negocios con PDVSA luego de las sanciones comerciales impuestas por primera vez a principios de 2019.
De esta manera, el Departamento de Estado de Estados Unidos no hizo comentarios sobre la reanudación del comercio petrolero directo entre Venezuela y China.
La alianza ideológica de China y Venezuela
China se ha unido a los otros aliados cercanos de Venezuela, Rusia y Cuba, para criticar públicamente las sanciones contra Venezuela, miembro de la OPEP. Lo cual ha permitido a Venezuela reanudar el envío de petróleo.
El gobierno socialista de Maduro se reunió este mes con una delegación de funcionarios y empresarios chinos para promocionar una nueva ley para promover la inversión a pesar de lo que Caracas ha llamado un «bloqueo» de Washington. La ley permite al gobierno firmar nuevos acuerdos petroleros de forma confidencial.
Maduro dijo durante la reunión que enviaría una carta al presidente de China, Xi Jinping, alentando relaciones comerciales más sólidas entre los dos países.
«Tenemos que avanzar con inversiones, con creación de riqueza, con nuevas alianzas. La ley anti-bloqueo permite todo eso. Hagámoslo en esta nueva etapa», dijo Maduro.
Finalmente, es bien conocido que los intereses ideológicos de China compaginan con el actuar del gobierno venezolano en muchos aspectos. Permitiendo que estas relaciones diplomáticas mantengan su conexión, pese a las sanciones americanas.