La gigante petrolera Exxon Mobil, promete destinar hasta $10.000 millones de dólares para la recompra de acciones. Con estos planes, la empresa demuestra que está de vuelta tras una década de oscuridad para el mercado petrolero. Los altos precios del crudo, gas y derivados petroquímicos, dan una mano a los planes de la compañía.
Con el auge de los precios de esta clase particular de commodities, la empresa habría ganado $1.58 dólares por acción. Esta cantidad es superior al estimado de analistas del portal Bloomberg de $1.56. Así, las ganancias netas, excluyendo algunas pérdidas y ganancias extraordinarias, fueron de $6.8 mil millones de dólares.
En consecuencia, a principios de semana, la compañía elevó los dividendos como una muestra de resurgimiento de su fuerza financiera. Atrás parecen quedar los tiempos en que la firma se vio en la necesidad de solicitar préstamos para sostener pagos y perforaciones durante la pandemia.
Exxon Mobil renace con suficiente fuerza: ¿Es sostenible su impulso?
Pese a la solidez que promete Exxon Mobil, con la probable canalización de hasta $10 mil millones en recompra de acciones, no todos ven estabilidad. En otra época, un rally en los precios del petróleo hubiera llevado, como en efecto lo hizo, a grandes promesas. Los inversores se habrían volcado hacia las compañías petroleras.
Sin embargo, ahora hay otra perspectiva. ¿Qué ha cambiado desde entonces en el mundo de los hidrocarburos? Una de las razones de mayor peso, es que el mundo y sus legislaciones están girando hacia políticas más amistosas hacia el medio ambiente. En consecuencia, la mayoría de los países industrializados están moviéndose con fuerza a la disminución en la emisión de gases de efecto invernadero.
Con ello, la transición de una industria contaminante hacia una sustentable, deja por fuera al petróleo por razones más que obvias. En ese sentido, los grandes inversores, pese al prospecto de obtener importantes ganancias con las acciones petroleras, prefieren moderarse.
De este modo, pese a las promesas y a los estímulos positivos que promete Exxon Mobil hasta ahora, para ella no hay nada garantizado. Esta tendencia de debilitamiento de las grandes petroleras, parece que se agudizará con el pasar del tiempo. Si los inversores titubean a la hora de invertir en un momento de grandes retornos, es de esperar que hagan lo mismo en momentos de caída.
Las ganancias se irán en deudas
El citado medio, ofrece importantes datos de la situación de la empresa mencionada en cuanto a sus deudas. Estos aseguran que la mayor parte de las ganancias de la firma, será usada para pagar dividendos a sus acreedores. La deuda de la empresa, en tanto, es de unos $70 mil millones de dólares.
En una situación similar se encuentran las mayores petroleras rivales de Exxon. Cuatro de ellas, Chevron, TotalEnergies, Shell y BP, usarán sus fondos de ingresos adicionales para recompra de acciones. Se destaca que Shell y BP se vieron obligadas el año pasado a recortar sus dividendos.
En consecuencia, el hecho de que Exxon Mobil promete recompra acciones por valor de hasta $10 mil millones, no parece un paso muy original entre las petroleras. Los inversores podrían optar entre obtener ganancias e irse a la cama con la conciencia sucia, o abstenerse de las ganancias.
Sea como sea, los planes de inversión en exploración e infraestructura correspondientes, tiene un panorama cada vez más sombrío. Esto último para mal de las empresas, pero para bien del ambiente.
