Actualmente, el gobierno chino enfrenta un creciente déficit de efectivo, dicen los analistas, y predicen un aumento de la deuda para llenar ese vacío.
«La última ola de Ómicron y los bloqueos generalizados desde mediados de marzo han resultado en una fuerte contracción en los ingresos del gobierno chino, incluidos los ingresos por ventas de tierras». Expresó Ting Lu, economista jefe de China de Nomura, en un informe la semana pasada.
Asimismo, los analistas estiman un déficit de financiación de unos 6 billones de yuanes ($895.520 millones de dólares). Del déficit total, unos 2.5 billones de yuanes son debido a la disminución de ingresos por impuestos y menor producción económica, y otros 3.5 billones de yuanes por la pérdida de ingresos por ventas de tierras.
Además, incluso antes del último brote de Covid-19, las ventas de terrenos, una fuente importante de ingresos del gobierno chino, se ha desplomado tras la represión de Beijing contra la alta dependencia de la deuda de los desarrolladores inmobiliarios.
Según los analistas, el gobierno chino hará uso de distintas medidas para enfrentar la situación, y enumeraron varias, desde el uso de depósitos fiscales hasta el aumento de los préstamos, que podrían usarse para compensar el déficit.
Muchas de las «medidas de estímulo», ya sean bonos gubernamentales especiales o préstamos de los bancos, se utilizarán simplemente para llenar este vacío de efectivo. Dijeron los analistas de Nomura.
Los datos económicos de abril mostraron un crecimiento debilitado de China a medida que los radicales controles por el Covid-19 pasaron factura. El primer ministro chino, Li Keqiang, dijo durante una reunión nacional efectuada la semana pasada que las dificultades «eran mayores que en 2020».
Los ingresos de las provincias chinas registraron caídas en sus ingresos fiscales
El banco japonés y los analistas de otras firmas no compartieron cifras específicas sobre cuánta deuda adicional podría ser necesaria para sanar la situación. Sin embargo, señalaron la creciente presión sobre el crecimiento del déficit, requeriría un mayor impulso de la deuda.
Asimismo, el gobierno chino comentó que los ingresos fiscales locales disminuyeron un 4,8% interanual durante los primeros cuatro meses del año. También, ocho de las 31 provincias chinas, experimentaron una caída en sus ingresos fiscales durante ese tiempo, dijo el ministerio, sin nombrarlas.
Por otro lado, los datos de Wind Information mostraron que las provincias de Qinghai, Shandong, Liaoning, Hebei, Guizhou, Hubei, Hunan y Tianjin registraron disminuciones interanuales en sus ingresos fiscales durante los primeros cuatro meses del año actual. La región de Tianjin sufrió la peor disminución en sus ingresos fiscales, una caída interanual del 27%.
«Es importante notar que la disminución de los ingresos fiscales no solo ocurrió en las ciudades bajo confinamiento». Dijo Zhiwei Zhang, presidente y economista jefe de Pinpoint Asset Management.
«Muchas ciudades sin brotes de Ómicron también sufrieron, ya que sus economías están vinculadas a las que actualmente están bloqueadas». Expresó Zhiwei Zhang a mediados de mayo. «Los costos económicos no se limitan a un pequeño número de ciudades, es un problema nacional», agregó.
La ciudad de Shenzhen ve una caída en sus ingresos fiscales
Desde marzo, China ha tratado de controlar su peor brote de Covid-19 en dos años, con fuertes confinamientos y restricciones de viaje en muchas partes del país, en particular en Shanghái y la región circundante.
A pesar de que los datos financieros no están disponibles para muchas ciudades de China, el centro tecnológico del sur de Shenzhen publicó cifras que muestran una caída interanual del 44% en los ingresos fiscales en abril a 25.530 millones de yuanes (unos $3.800 millones de dólares), seguido de una disminución interanual del 7% en marzo a 22.950 millones de yuanes ($3.400 millones de dólares).
«Los gobiernos locales enfrentan una creciente presión fiscal, su gasto está aumentando, pero los ingresos están cayendo». Dijo Zhiwei Zhang. «Las ventas de terrenos también han bajado drásticamente. Creo que el gobierno central tendrá que revisar el presupuesto fiscal y emitir más deuda para ayudar a los gobiernos locales», agregó.
Beijing anunció en marzo un aumento en la transferencia de fondos del gobierno central a los gobiernos locales. Asimismo, el Ministerio de Finanzas señaló que algunos fondos para el próximo año se transferirían con anticipación para ayudar a los gobiernos locales con los reembolsos y recortes de impuestos durante este año.
China incrementó el gasto en infraestructura
Para Susan Chu, actual directora sénior de S&P Global Ratings, la situación de China respecto su déficit «es preocupante».
«El déficit en la venta de terrenos, creará una presión deficitaria, por otro lado, es probable que aumenten las presiones en los gastos de infraestructura». Expresó Susan Chu en una entrevista a principios de este mes.
«Un déficit de efectivo cada vez mayor, significa que existe la posibilidad de más préstamos o carga de deuda en el futuro», comentó Chu.
A finales de abril, el presidente chino, Xi Jinping, solicitó un impulso a nivel nacional para desarrollar una infraestructura que abarque desde vías fluviales hasta la infraestructura de computación en la nube. No obstante, no estaba claro a qué escala o plazo se construirían los proyectos.
«Este año, una consecuencia será que quedará menos dinero para gastos de infraestructura». Comentó Jack Yuan, vicepresidente y analista senior de Moody’s Investors Service, en una entrevista.
Asimismo, Yuan agregó que las ventas de terrenos han sido una fuente importante para el gasto del gobierno local en infraestructura. Por ello, una caída en las ventas de terrenos y un aumento limitado en los bonos para fines especiales, restringiría las opciones de financiamiento para el gasto en infraestructura.
«Pronosticamos que la deuda continúe aumentando este año como resultado de estas presiones económicas». Dijo Yuan, y señaló que queda por ver, cómo Beijing decide equilibrar el crecimiento económico con los niveles de deuda de este año.