Pocos inversionistas tienen un récord tan brillante y el mismo tiempo tan terrible como Peter Thiel. Y es que, aunque ha tenido triunfos importantes a lo largo de su trayectoria, como las inversiones en grandes empresas como Facebook o SpaceX. Al mismo tiempo Thiel ha cometido errores garrafales que le han costado millones de dólares. Por lo que no es una locura calificar a Peter Thier como el mejor y el peor inversionista de Silicon Valley.
Peter Thiel, el visionario de Silicon Valley
Pocos pueden jactarse de haber previsto el rumbo que tomaría el mundo hace dos décadas. La idea de que pronto las redes sociales se volverían una parte crucial y omnipresente de nuestras vidas, podía parecer el argumento de un libro de ciencia ficción a inicios del siglo XXI. Peter Thiel no veía las cosas de esta manera.
De hecho, la confianza de Peter Thiel, un abogado alemán de tendencias liberales y educado en Stanford, en su visión del futuro era tan grande que decidió invertir medio millón de dólares en Mark Zuckerberg durante las etapas iniciales de la fundación de Facebook.
Este no fue el único gran éxito de Peter Thiel, pues el inversionista también habría sido uno de los primeros en apostar en PayPal Inc., la empresa de Elon Musk, SpaceX, y por supuesto Palantir Technologies, la oscura y controvertida compañía de análisis de datos que recién salió a la bolsa en los Estados Unidos. La cual provee de servicios de análisis, con énfasis en la inteligencia artificial y la big data, al gobierno estadounidense y empresas americanas.
A esto se le sumarían los primeros años de Clarium Capital, una firma de inversiones fundada por Thiel. La misma contó inicialmente únicamente con el capital personal del inversionista, sin embargo gracias a su correcta predicción del aumento del precio del petróleo y el colapso del mercado inmobiliario, pronto la firma estuvo administrando 7.2 millardos de dólares, luego de haber empezado con tan solo 10 millones.
El peor inversionista del valle
Sin embargo, y a pesar de todos estos éxitos, la riqueza de Peter Thiel asciende en la actualidad a tan solo 5.3 millardos de dólares. Una cifra imponente, pero ni cercana a lo que podría haber logrado si hubiese cometido menos errores en sus inversiones. Incluyendo la venta temprana de la mayoría de sus acciones en Facebook en 2012 a menos de 20 dólares la acción, debido a un acuerdo previo. Con lo que perdió más de 10 millardos de dólares en ganancias potenciales.
A esta mala decisión se le sumaría la venta de sus acciones en PayPal, las malas inversiones realizadas con Clarium Capital luego de la crisis de 2008, que llevaron a que transformase la firma de inversiones en un vehículo de inversión personal, y la apuesta en distintas empresas que no han llegado a nada. Incluyendo en esta última lista la inversión de 100 millones de dólares en la firma Mithril Capital que ha generado pérdidas constantes.
Sin embargo, no todas las inversiones de Peter Thiel en el Silicon Valley buscan hacer dinero. Por el contrario, tal como lo demuestra su participación en la co-fundación del Seasteading Institute, dedicado a la creación de una isla flotante para los seres humanos, o el grant de 100.000 dólares que otorga la Thiel Foundation a estudiantes que abandonan la Universidad para construir «cosas nuevas», el principal objetivo de Thiel es cambiar el mundo.
Así, detrás de todas las inversiones de Peter Thiel en Silicon Valley, tanto las buenas como las malas, se encuentra la misma motivación. Es decir, la profunda creencia del multimillonario en que el mundo necesita un cambio fundamental, el cual espera proveer a través de la tecnología.