Los planes del gobierno chino de impulsar su moneda digital han llegado a tal punto de bloquear a «la competencia directa». Y para ellos, el Bitcoin y las criptomonedas significan un obstáculo para la adaptación masiva de su yuan digital. Sin embargo, esto afectó al ecosistema cripto. Pues, China era un centro importante de flujo para el cripto mundo. Pero, estas prohibiciones no han detenido a los traders del gigante asiático, y ahora actúan haciendo inversiones en la clandestinidad.
Asimismo, es importante hablar del ‘eYuan’. Esta es una criptomoneda controlada por el Banco Central. Que permita a las autoridades del país conocer todas las transacciones de todos sus ciudadanos, minuto a minuto. Y sus pruebas ya avanzan en varias ciudades como parte de su plan de bloqueo de las criptomonedas.
Es así que en las zonas donde se están realizando las pruebas, los gobiernos locales han repartido millones de yuanes digitales entre sus ciudadanos. Además, para poder acceder a ese dinero tienen que descargarse un monedero digital. Que está en permanente conexión con las autoridades del país. Es por ello que, cada operación que realicen los ciudadanos será registrada y estudiada por el gobierno chino. Esto como parte del bloqueo de criptomonedas.
Los traders desafían las medidas represivas de China con apuestas secretas
Los traders chinos están prestando poca atención al mayor bloqueo de criptomonedas del gobierno desde 2017. Lo que subraya el desafío para Pekín en su intento de frenar el auge especulativo de los activos digitales.
De esta manera, las ventas precipitadas han dado paso a una recuperación constante en las plataformas extrabursátiles. Las cuales, los operadores chinos de criptomonedas han utilizado desde que se prohibieron las bolsas nacionales en 2017.
Asimismo, un indicador clave del sentimiento local es el tipo de cambio entre el yuan chino y la stablecoin Tether. El cual cayó hasta un 4,4% después de la advertencia del gobierno sobre el bloqueo de criptomonedas, a principios de este mes. Pero desde entonces ha recuperado más de la mitad de la pérdida, según la plataforma de datos de criptografía Feixiaohao, un equivalente chino de CoinMarketCap.
Por su parte, China intensificó sus medidas de represión. Esto después de que el frenético aumento de Bitcoin y otros tokens en los últimos seis meses aumentara la preocupación del Partido Comunista. Debido a la posibilidad de fraude, blanqueo de dinero y pérdidas en las operaciones de los inversores individuales.
Sin embargo, la naturaleza difícil de rastrear de las transacciones en las plataformas locales OTC y las redes peer-to-peer significa que será extremadamente difícil para las autoridades aplicar una prohibición general.
Finalmente, esto puede suponer un alivio para los entusiastas de las criptomonedas en todo el mundo. Esto después de que la preocupación por el desplome del poder adquisitivo chino contribuyera a la venta de casi mil millones de dólares en activos digitales. Desde los máximos históricos alcanzados a mediados de mayo.
El Bitcoin se recupera parcialmente de la caída provocada por el bloqueo de criptomonedas del gobierno chino
Antes de que China prohibiera los intercambios de criptomonedas en 2017, se estima que los inversores locales poseían un 7% del Bitcoin mundial. Y a su vez representaban alrededor del 80% de las operaciones. Esto según los medios de comunicación estatales. Es así que la prohibición de los intercambios ha hecho imposible calibrar esas cifras hoy en día.
Cabe mencionar que los reguladores recordaron este mes a los bancos y empresas de pagos chinos la obligación de identificar y bloquear las transacciones sospechosas. Y señalaron que facilitar las operaciones con criptomonedas a menudo viola las normas bancarias. Es así que El Consejo de Estado de China pidió que se tomaran medidas drásticas contra el comercio y la minería de Bitcoin. Y prometió prevenir «decididamente» los riesgos financieros.
Es posible que los responsables políticos quieran evitar cualquier perturbación importante del mercado. Esto en torno al políticamente sensible centenario del Partido Comunista en el poder, el 1 de julio.
Finalmente, los reguladores chinos no han llegado a calificar de ilegales las operaciones individuales, pero la ofensiva implicará al departamento de seguridad pública. Ya que se sospecha que algunas de las actividades han facilitado el blanqueo de dinero. Y la financiación del terrorismo, según una persona familiarizada con el asunto.
Inicia una campaña de amenaza contra las criptos en China
La policía de Pekín ha distribuido advertencias impresas sobre los posibles riesgos asociados a las criptodivisas. Las monedas virtuales son uno de los medios más populares para las últimas estafas. Y cualquier persona que tenga dificultades para distinguir o no esté segura de qué hacer debe llamar al contacto del policía local indicado. Esto según un aviso visto por Bloomberg.
A su vez, En las redes sociales, algunos inversores en criptomonedas han afirmado que la policía local les ha convocado recientemente. Esto para advertirles del riesgo de invertir en criptomonedas. Asimismo, un inversor dijo que las autoridades locales le exigieron que vendiera sus participaciones. Otro, dijo que la policía le pidió que borrara la aplicación de comercio de su teléfono.
No es un secreto que las oscilaciones de los precios de las criptos han causado estragos en China. Un ejemplo de esto se trata de un chino de la ciudad oriental de Dalian. Este sujeto mató a su hija de tres años e intentó suicidarse con su mujer. Esto tras perder 20 millones de yuanes (3,1 millones de dólares) en una apuesta apalancada en Bitcoin el pasado mes de junio, según informan los medios locales.
Peter, un trabajador tecnológico de Pekín, invirtió 20.000 yuanes en criptodivisas hace tres semanas, justo a tiempo para la última ronda de volatilidad. En cuestión de días, su cartera creció hasta alcanzar los 100.000 yuanes, para luego caer rápidamente hasta los 14.000 yuanes. Se hizo eco de la filosofía «carpe diem» de los operadores de criptomonedas de todo el mundo: «No importa si todo se va a cero. Pero, ¿y si un día me trae una riqueza repentina?».
