La nación insular sigue capitalizando la atención de la comunidad internacional. Y es que en medio del auge de las criptodivisas a nivel global; Cuba adopta a las criptomonedas como un objetivo a consolidar dentro de su política nacional. Desde EnQuéInvertir te contamos.
Nuevos vientos recorren Cuba
Sería justo decir que en la actualidad, Cuba atraviesa un periodo de grandes cambios. Durante el último día del VIII Congreso de la Formación Política; oficialmente el apellido Castro se retira de la palestra pública del país; todo para dar pasó a Miguel Díaz-Canel como nuevo secretario del Partido Comunista.
Dado que hay nuevo líder dentro del partido, nuevos objetivos salen a la luz. Para mejorar su economía, Cuba adopta el uso de criptomonedas como política oficial de Estado; un elemento con el que pretende impulsar su motor productivo; así como restar el impacto de las sanciones impuestas por el gobierno Washington.
Vale decir que las criptomonedas retienen la atención del gobierno de la Habana desde el 2019. Sin embargo, impulsado por el auge de las criptodivisas en tiempos recientes, el Partido Comunista pretende «avanzar en el estudio de las criptomonedas en las condiciones actuales de la economía»; proyecto que plantea concretar en los próximos 5 años.
Un camino abstracto con vistas a su consolidación
Dado que Cuba adopta las criptomonedas dentro de su esquema político; resulta lógico preguntarnos los medios que el gobierno podría utilizar de cara a este nuevo objetivo. Ciertamente las autoridades no han revelado mayores detalles al respecto; sin embargo, es posible conseguir algunos indicios en Venezuela; Estado con el que el gobierno de la Habana ostenta fuertes lazos.
Dicho esto, Venezuela es un país en donde la popularidad de las criptomonedas sigue en aumento. Dado que los índices inflacionarios no paran de crecer, las criptodivisas han fungido como un mecanismo de resguardo de capital; todo en una economía donde el Bolívar Soberano, la moneda oficial venezolana; se deprecia a pasos agigantados.
El gobierno de Caracas ha intentado responder a esta realidad a través del Petro; un criptoactivo regulado por las autoridades gubernamentales, el cual ancla su valor a las reservas petroleras de la nación suramericana. Aunque la criptodivisa no ha logrado consolidar su circulación dentro de la economía nacional; las autoridades venezolanas lo utilizan como mecanismo de tabulación y pago de servicios como el expendio de pasaportes; así como para la consignación de subsidios a sectores sociales del país.
Así mismo; en el 2019, el Banco Central de Venezuela evaluó la posibilidad de acumular parte de las reservas nacionales en Bitcoin; y aunque no ha habido mayores declaraciones al respecto; nuevas reformas legislativas hacen que la opción siga latente para la entidad gubernamental.
Dicho esto, ya que Cuba adopta las criptomonedas como canalizador de su economía; no sería una rareza ver estas mismas medidas dentro de las políticas macroeconómicas de la Habana; aunque es justo decir, esto solo el tiempo lo dirá.
Las criptomonedas siguen creciendo en el país
Aunque en Cuba existen fuertes limitaciones en materia de servicio eléctrico y telecomunicaciones; criptodivisas como Bitcoin, Ethereum, Litecoin y USDT han crecido exponencialmente en la economía nacional.
Pese a que no existen cifras oficiales que revelen el flujo de criptomonedas en la región; se estima que el uso de monedas digitales se multiplicó especialmente durante la antigua administración de Donald Trump; el cual reafirmó las sanciones para aquellas instituciones que crearan lazos con el gobierno de la Habana; y que además suspendió el permiso de Western Union para realizar operaciones en el Estado insular.
Finalmente, valdría la pena señalar que las criptomonedas no solo están en la mira del gobierno cubano. Del mismo modo, países como Brasil e Irán plantean establecer acercamientos a las criptomonedas en un futuro cercano.
Con todo esto, puede que el caso más iconográfico sea el de China; país que aunque cuenta con importantes restricciones para las monedas digitales dentro de su territorio; tal como Peter Thiel, cofundador de PayPal comenta; podría usar el Bitcoin como un arma política en perjuicio de la hegemonía del dólar a nivel internacional.