La gigantesca firma inmobiliaria china, Evergrande, entra en default luego de incumplir sus obligaciones de deuda. El anuncio de la situación fue realizado este viernes en solitario por parte de Fitch Ratings. Sin embargo, debe destacarse que otras importantes calificadoras y la propia empresa guardan silencio.
El tenso silencio de firmas como Moody’s y S&P Global Ratings, busca retrasar el momento del impacto que tendría este hecho en todo el mercado. Debe destacarse que aún falta la última palabra de las autoridades de China. La seguridad de calificar a esta empresa en banca rota, la dan las informaciones que a principios de semana la misma comunicó.
Así, el lunes la empresa afirmó que «no había garantías» de pagar sus obligaciones de deuda próximas a vencerse. En ese momento, todos los actores del mercado comprendieron que la endeudada compañía estaba concluyendo su fase de agonía. Pese a ello, pocos se atrevieron a anunciarlo, de la misma manera que no se atreven ahora a confirmar la situación.
¿Es posible que Evergrande tenga otro destino aparte del default?
El hecho de que Evergrande entra en default esta semana por no pagar las obligaciones correspondientes, es más que seguro. No obstante, la participación de Pekín en el asunto podría cambiar el rumbo de la situación. Aunque las autoridades de esa nación vienen siendo rotundas en su negativa a intervenir, las mismas tienen sus motivos.
Entre estos últimos, se destaca que esta empresa con su caída arrastraría no solo al sector inmobiliario, sino a decenas de bancos de esa nación. Por ello, no es del todo descartable que las autoridades tengan un plan detrás del hermetismo acostumbrado. Por otro lado, una participación del Estado empujaría a otras empresas del sector a declarar quiebras respectivas para obtener «rescates».
Tal situación, sería insostenible para el Partido Comunista de China. Debe tenerse en cuenta que sus dirigentes mantienen firmes sus principios y repetidamente declararon que las viviendas son para ser habitadas por familias y no para especular. Asimismo, el gobierno estaría dejando que la firma se derrumbe para dar una lección al resto.
Independientemente de cuál sea la postura de las autoridades del país asiático sobre el default en el que entra Evergrande, las consecuencias serán inevitables. Tanto si el Estado interviene o no, habrá una nueva sacudida en esa bolsa y otras.
El significado de quiebra restringida
Un aspecto importante de la calificación de Fitch de «restricted default» o quiebra restringida sobre la inmobiliaria china, es que la misma no varía en significado. Este concepto significa simplemente que la empresa no cesó operaciones o incluso no inició los procesos formales de declararse en bancarrota frente a las autoridades.
Como ya se resaltó, lo llamativo de este hecho es que no existen más menciones entre los expertos e incluso desde la propia empresa. Importantes medios como CNBC, afirman que sus intentos de obtener declaraciones oficiales de las calificadoras y de las autoridades de la firma, no fueron atendidas.
En ese sentido, por ahora solo se puede decir que la visión de que Evergrande entra en default está basada en la suposición de su incumplimiento de dos pagos esta semana. La misma directiva de la inmobiliaria dijo a principios de semana que era poco probable que honrara sus deudas. El gobierno de la provincia de Guangdong, donde está la sede de la empresa, respondió ese comunicado.
Asimismo, en su momento se conoció que el gobierno de la provincia enviaría un equipo para trabajar en conjunto por la recuperación de la empresa. Por otro lado, las autoridades del banco central chino subrayaron que la caída de la empresa en esta situación es entera responsabilidad de sus directivos y no de la situación del mercado.
