El banco central chino presagió recientemente una fuerte desaceleración en la concesión de créditos. Para remediarlo, prometió que presionaría a los bancos para que bajaran sus tasas reales de interés. Con esto último, busca estimular el acceso a los préstamos y el crecimiento económico.
Las autoridades del país comunista están alarmadas ante la baja solicitud de créditos, la cual pone en juego las medidas de flexibilización monetaria. En su informe correspondiente al tercer trimestre, el ente estatal dijo que el cambio de estructura de los préstamos sería positivo para la economía nacional. Citado en Bloomberg, el reporte pide a los observadores mirar más allá del volumen de nuevos préstamos.
Los nuevos préstamos fluyen rápidamente hacia sectores estratégicos como tecnología y manufactura. Asimismo, los préstamos hacia plataformas de financiación inmobiliaria y gobiernos locales se están desvaneciendo, alertó el Banco Popular.
Esto último se convierte en una situación de alto peligro para Pekín, considerando que hay un efecto dominó que se relaciona con el sector vivienda. Las personas jóvenes no tienen acceso a hogares, lo que les desmotiva a tener hijos, generando así un terrible prospecto futuro para la economía de la segunda potencia mundial.
Banco central de China quiere remediar la situación
Expertos citados por el mismo medio también reconocen que la situación está empeorando en el sector bancario, específicamente en lo relacionado con los créditos. «El crecimiento del crédito puede desacelerarse con respecto a su ritmo de expansión anterior», expresaron en un informe algunos expertos de Zheshang Securities.
Uno de estos especialistas, Li Chao, puntualizó que «China ha mantenido el ritmo de expansión del crédito por encima del 10% en los últimos años y ahora existe la posibilidad de que caiga por debajo del 10% en el futuro». Este análisis tiene mucho en común con las medidas de las autoridades del Banco Popular. Estas orientan a que los créditos orientados para principios de 2024 se adelanten en la medida de lo posible.
Esto último deja en evidencia que la prioridad está cambiando hacia la mejora de la eficiencia en la estructura de los préstamos. Un dato importante a tener en cuenta es que el financiamiento agregado se recupera con serias dificultades este año. Actualmente, esta medición amplia ronda un mínimo histórico de 9% de crecimiento interanual.
Como ya se mencionó, la caída en la demanda de endeudamiento se amplifica por la crisis en el sector de viviendas. A esto se suman las acciones del Partido Comunista por limpiar la denominada deuda oculta.
En suma, todo este escenario se convierte en una pesadilla para las autoridades, en especial para el banco central chino. Este último promete reorientar las tasas de depósitos para que se ajusten con las condiciones de mercado. Al mismo tiempo de esto, también se compromete a reducir las tasas de interés reales.
