Muchos han sido los marineros mercantes, camioneros y el personal de los vuelos internacionales comerciales y de envíos, que han tenido que sobrellevar medidas de cuarentena. Esto al igual que las restricciones de viaje, cierres y bloqueos fronterizos. Así como vacunas complejas y requisitos de pruebas de COVID-19 para mantener la cadena de suministro global, sin que sufra tantos golpes o consecuencias.
Sin embargo, ahora son muchos barcos los que están llegando al punto de quiebre. Lo que simboliza una amenaza más para el ya acontecido sistema de cadena de suministros y puertos mundiales. También los portacontenedores y empresas de transporte por carretera que mueven carga por todo el mundo, están sufriendo mucho las consecuencias.
Pero, ahora, las interrupciones de la cadena de suministros global, pudiera empeorar.
La cadena de suministro sufrirá más en este último trimestre del año 2021
Las restricciones e interrupciones de la cadena de suministros que continúan bloqueando el ritmo y el crecimiento económico global van a empeorar. Esto en el transcurso del último trimestre del año, manteniendo la inflación elevada por más tiempo. Esto incluso si el alza actual de los precios siga siendo temporal. Así advirtieron el miércoles los principales banqueros centrales del mundo.
Asimismo, las interrupciones en la cadena de suministros la economía mundial durante la pandemia han alterado las cadenas de suministro en todos los continentes. Dejando al mundo sin una abundancia de bienes y servicios. Esto desde repuestos de automóviles y microchips hasta buques portacontenedores que transportan bienes a través de los mares.
«Es frustrante ver que los cuellos de botella y los problemas de la cadena de suministro no mejoran, de hecho, en el margen aparentemente empeoran un poco», dijo el presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, en una conferencia.
Además, explicaron lo siguiente: «Vemos que probablemente continuará en el próximo año. Y mantendrá la inflación más tiempo de lo que habíamos pensado», dijo Powell al Foro de Banca Central del Banco Central Europeo.
Por su parte, hablando junto a Powell, la directora del BCE, Christine Lagarde, expresó preocupaciones similares. Argumentando que el fin de estos cuellos de botella, que los economistas pensaban que estaban a solo unas semanas, es incierto.
«Los cuellos de botella de suministro y la interrupción de las cadenas de suministro, que hemos estado experimentando durante algunos meses parecen continuar y en algunos sectores se están acelerando», dijo Lagarde. «Estoy pensando aquí en el envío, el manejo de carga y cosas por el estilo».
La inflación global seguirá siendo un motivo de preocupación
La inflación mundial se ha disparado, esto como factor de las interrupciones en la cadena de suministros en los últimos meses. También, debido a un aumento en los precios de la energía, y los cuellos de botella en la producción están empujando los precios aún más alto. Lo que genera temores de que el aumento, si dura lo suficiente, pueda filtrarse en las expectativas y elevar el perfil general de la inflación.
De hecho, Lagarde dijo que el BCE estaría «muy atento» a estos efectos de segunda ronda. Esto mientras que el gobernador del Banco de Inglaterra, Andrew Bailey, otro orador en el foro, dijo que mantendría «una vigilancia muy de cerca» sobre las expectativas de inflación.
El problema es que los bancos centrales, la principal autoridad para controlar los precios, no tienen influencia sobre las interrupciones de la cadena de suministro a corto plazo. Por lo que es probable que sean espectadores, esperando a que las anomalías económicas se autocorrijan sin un daño duradero.
Asimismo, las preocupaciones sobre la inflación «rígida» han alimentado un debate. Esto sobre la necesidad de deshacer las medidas de estímulo de la era de la crisis y las reducciones de la cadena de suministros. De esta manera, los comentaristas del panel del miércoles reforzaron las expectativas de que los bancos centrales más grandes del mundo se mueven en horarios muy diferentes. Manteniéndose desincronizados durante los próximos años.
Finalmente, la Fed, el BoE y el Banco de Canadá han discutido abiertamente el endurecimiento de las políticas. Esto mientras que los bancos centrales de países como Corea del Sur, Noruega y Hungría ya han elevado las tasas de interés. Comenzando un largo camino hacia la normalización de las políticas.
