Luego de haber vivido el peor trimestre de su historia, la economía de Estados Unidos logró crecer a un ritmo anualizado de 33,1%, de acuerdo con lo informado por el Departamento de Comercio el día de hoy.
¿La economía de Estados Unidos ya no tiene nada que temer al COVID-19?
La explicación por la cual la economía de Estados Unidos logró mostrar un crecimiento inesperado durante el tercer trimestre del año es bastante simple.
Durante dicho período las empresas reabrieron y, con ayuda de los estímulos económicos, el gasto de los consumidores se incrementó. Todo esto revirtió una parte del colapso que la economía estadounidense experimentó con la pandemia del COVID-19.
Así el producto interno bruto creció a una tasa anualizada del 33,1% entre julio y septiembre, según lo publicado por Bloomberg.
Vale la pena tener presente que esto sucede tras la caída del 31,4% durante el segundo trimestre; siendo en su momento incluso un alivio al compararlo con la caída del 32% que fue estimada por los economistas.
La recuperación tomó por sorpresa al mundo y al mercado; los economistas previamente estimaron un aumento del 32% para el PIB, la cual ya estaba muy por encima de las previsiones de hace tres meses de un aumento del 18%.
De esta manera, se trata de la mayor ganancia de salida registrada en los datos que se remontan a la década de 1940. El previo salto más grande se registró en 1950, este es dos veces el de ese momento.
Una prueba sobre qué factor está detrás de dicho repunte es el aumento del 40,7% anualizado en el gasto personal; mientras que la inversión empresarial y la vivienda también registraron importantes aumentos, según Bloomberg.
No obstante, dado que estamos en época de Halloween, me gustaría hacer el símil del COVID-19 con el payaso Pennywise de la película IT. El virus sigue aquí, presente y ganando fuerzas; así que no, no estamos a salvo.
La amenaza sigue presente
Claramente el informe revela que, al menos por ahora, la economía de Estados Unidos encontró una base para crecer. No obstante, cuidado si piensas que la economía está a salvo.
Ciertamente la economía logró recuperarse parcialmente a medida que se suavizaron las restricciones pero la realidad es que el gran impulso ha quedado atrás y las infecciones por COVID-19 están aumentando.
Hago énfasis en una «recuperación parcial» porque, aunque una recuperación del 33,1% es significativa, la economía se encuentra un 3,5% por debajo de donde estaba a fines de 2019. De hecho, el crecimiento del tercer trimestre tenía que haber sido de aproximadamente 46% para equilibrar la desaceleración.
Lo anterior lo podemos observar en la siguiente gráfica publicada por CNN.
Otros indicadores económicos también relevantes, como el nivel de desempleo, no ofrecen una imagen tan positiva como la recuperación acelerada del PIB. De hecho, aproximadamente la mitad de los estadounidenses que perdieron su empleo a causa de la pandemia siguen desempleados.
Por consiguiente se espera que, a medida que dejemos atrás los cambios violentos en la actividad económica que vimos entre marzo y septiembre, «las realidades sobrias de la situación económica se harán más evidentes», dijo Brian Coulton, economista jefe de Fitch Ratings, según CNN.
Asimismo, Seema Shah, estratega en jefe de Principal Global Investors, explicó que de ahora en adelante «el camino a seguir será inevitablemente una lucha cuesta arriba».
En conclusión, los economistas enfatizan que una recuperación completa puede llevar años de la economía de Estados Unidos; de hecho, se apunta a un crecimiento muy por debajo del 10% durante el último trimestre de 2020.
Reacción de los candidatos presidenciales
Como era de esperarse, el anuncio de las cifras anteriores fueron utilizadas por los candidatos presidenciales de Estados Unidos ha tan solo unos días del gran evento.
Por su parte, Donald Trump señaló en Twitter que el año que viene será fantástico haciendo referencia a la última cifra del PIB. Además, aprovechó para apuntar que la propuesta de impuestos de Joe Biden acabaría con todos los avances logrados.
«Me alegro de que este gran número del PIB saliera antes del 3 de noviembre», concluyó Trump.
En cuanto a Joe Biden, señaló que, si bien el PIB se mejoró, las visitas a los bancos de alimentos no se han desacelerado y la pobreza ha aumentado. Asimismo, aprovechó para enfatizar que Donald Trump será el primer presidente desde Herbert Hoover en dejar el cargo con menos trabajos que cuando llegó.
