Durante la última jornada semanal, presenciamos un breve cambio de tendencia en la bolsa. Wall Street cerró con un sentimiento de alivio a medida que se retomaban las tenencias de acciones. El mercado aprovechó la baja de junio para recomprar con precios reducidos. Sin embargo, el temor a la inflación persiste, y los operadores están al tanto de los cambios apresurados de la FED, que por ahora no se detendrán.
Entradas de capitales retornando
En medio de una ola de bajas constantes, los inversores optaron por entrar al riesgo en esta ocasión. A medida que avanzaba la corta semana, producto del feriado del lunes, las puntuaciones de la bolsa tomaron el impulso suficiente como para alejarse del las ventas denotadas en sesiones pasadas.
El mercado continúa asimilado la postura «severa» de la Reserva Federal frente a la economía estadounidense. Mientras que Wall Street cerró con un panorama de alivio, la entidad financiera no ha mostrado señales de querer detener sus cambios en las políticas monetarias. Estos están destinados a frenar la agobiante inflación.
Por el contrario, los funcionarios aclararon en sus últimas reuniones que los incrementos de las tasas de intereses podrían continuar de ser necesario. La FED está dispuesta a seguir endureciendo la reducción de estímulos económicos sin que «le tiemble el pulso».
Desde otro punto de vista, tal y como se esperaba, esta semana se conoció la tasa de desempleo durante junio. El cambio en la cifra fue prácticamente nulo, quedando en 3,6%, al igual que en la publicación anterior. Las señales positivas en el ámbito de los empleos serían un factor que la banca central buscaría para continuar con sus planes actuales.
Si bien los incrementos de las tasas mantienen el temor de los operadores latente, la bolsa tuvo más confianza esta semana, dando ventajas a los valores accionarios. Las entradas de capitales dominaron el entorno, a medida que algunos operadores aprovechaban la baja para comprar «barato».
Surgió un escenario «verde» esta vez
Las principales puntuaciones de la bolsa ganaron impulso en cada jornada diaria. Por su lado, el índice S&P 500 nos mostró que el mercado abandonó temporalmente las salidas masivas para retomar tenencias de acciones.
Dentro de un escenario de nuevas compras, la puntuación cerró este viernes en los 3.899,38 puntos. Se superó por unas modestas 74,05 unidades frente a la semana anterior (+1,93%). Parece que Wall Street mostró signos de alivio en medio de un comienzo de junio relativamente «bueno». Luego de pasar por un ámbito turbulento el mes pasado, encontramos a un mercado un tanto estable.
No obstante, la bolsa es consciente de la situación que afronta la economía estadounidense, y los accionistas observar minuciosamente las noticias y datos financieros que vayan apareciendo.
- Dow Jones cerró en los 31.338,15 puntos, ganando 240,89 unidades en la semana (+0,77%).
- Con la misma tendencia, el tecnológico Nasdaq quedó en los 11.635,31 puntos, ganando 507,46 unidades (+4,56%).
Más impulsos en el USD
En otro extremo, se visualiza un escenario de ganancias para la divisa estadounidense. El USD seguía ganando valor, mientras que las políticas monetarias lo posicionaban como un refugio para la volatilidad de la bolsa. Las entradas de capitales a la bolsa no debilitaron considerablemente a la liquidación de la moneda.
El índice DXY rompió la resistencia de 105 unidades, e inclusive, pudo avanzar hasta tocar las 106. En cuestión de pocos días, se vio beneficiado por las ventas masivas de acciones, durante jornadas semanales pasadas. No obstante, y a pesar de que los compradores volvieron parcialmente al riesgo, la puntuación sigue mostrándose fuerte.