Luego de ser desplazado por el auge de las acciones de lujo francesas, el mercado de valores británico parece recuperar terreno. La tendencia se volteó durante las últimas semanas luego del auge de los precios del petróleo y el enfriamiento económico de China.
Ambos mercados europeos tienen una fuerte exposición a sucesos foráneos y de allí que el intercambio del primer puesto sea frecuente. Las condiciones macroeconómicas en los mercados emergentes son el principal factor que determinará cuál será la próxima bolsa líder en el viejo continente.
A principios de año, la bolsa de París experimentó una fuerte subida gracias al fin de los confinamientos por covid-19 en China. En tanto, su par inglesa pasó por un terreno nada favorable y los principales analistas llegaron a considerarla como un mercado de baja categoría. De hecho, en agosto del año pasado, el Saxo Bank afirmó que el Reino Unido se estaba convirtiendo en un «mercado emergente».
- Producción de petróleo en EE.UU. en camino hacia un récord histórico impulsado por el auge del shale
El mercado de valores británico renace
Pero las condiciones vienen cambiando desde entonces en favor del mercado de valores británico frente a su rival francés. Es importante tener en consideración que la bolsa de valores de Londres tiene una alta exposición al mercado petrolero.
El aumento del precio del crudo y las altas posibilidades de $100 dólares por barril crean las condiciones para la recuperación de la bolsa londinense. Al mismo tiempo, las acciones de lujo de París pierden peso luego del congelamiento de la economía de China.
Los clientes chinos de las principales marcas bajan rápidamente la demanda de cosméticos, carteras y otros artículos de marcas de lujo. Vale la pena resaltar que empresas como LVHM, L’Oreal, Kering y Hermes representan una quinta parte de todo el peso del índice CAC 40.
Con esta presión, la bolsa de París bajó desde el récord de principios de año de $3,5 billones de dólares hasta $2,93 billones. Para diversos analistas consultados en Bloomberg, el problema es mayor a lo que se supone. Esto último se basa en el hecho de que la demanda de artículos de lujo franceses no solo está cayendo en China, sino en la propia Europa.
Al tiempo que esto sucede, el mercado de valores británico experimenta una recuperación al ritmo de la subida del petróleo. Hasta ahora, la capitalización del mismo se coloca en $190 billones de dólares, es decir, a un paso de su rival parisino.
Los principales pilares del FTSE 100
De una manera similar a la de Francia, el índice de referencia de Londres, el FTSE 100, depende de algunos actores de gran peso. Del mismo modo, el retroceso de la libra frente al dólar de Estados Unidos se convierte en un gran estímulo para las exportaciones.
A pesar de que el mercado de valores británico recorta distancias con su rival francés, eso no significa que todos los problemas pasaron. De hecho, la retirada de las empresas de la bolsa británica sigue en aumento y totaliza una pérdida de capitalización de $23 mil millones de dólares en lo que va de año 2023.
Los años seguidos de debilitamiento de esta bolsa hacen que sus acciones sean extremadamente baratas para los inversores. Algunas instituciones financieras afirmaron recientemente que es un momento ideal para aprovechar los bajos precios de las acciones de ese país europeo.
Por primera vez en años, un importante número de inversores tiene mente positiva y alcista con respecto a la bolsa londinense. De hecho, el año pasado el Bank of America lo catalogó como un mercado en el que nadie se fija.