miércoles, abril 24, 2024

La guerra en Europa reabre el interés por las criptomonedas

EnQuéInvertir
EnQuéInvertir
Este contenido ha sido generado por el equipo de redacción de EnQuéInvertir.
- Publicidad -

Te puede interesar

La crisis económica a la que el mundo parecía abocado después de la pandemia de coronavirus ya se está viendo agravada por la invasión rusa, y las durísimas sanciones que el bloque representado por la UE y los EEUU han impuesto a Rusia parece que no van sino a profundizar las dificultades financieras sobre todo en Europa.

Esto se debe a que allí se localiza el conflicto y la Unión Europea que compra una gran cantidad de materias primas al gigantesco país euroasiático, además de que las naciones europeas tienen, o tenían, grandes inversiones en el país dirigido por Putin, las cuales, por culpa de las sanciones o como forma de preservar la imagen pública de las compañías -algo que puede ensalzar o hundir a una empresa rapidísimamente-, se están liquidando con gran rapidez, lo que puede extenderse a las empresas japonesas -el gigante de la automoción Toyota ya ha cesado su actividad-, que en este asunto va de la mano con sus socios europeos y estadounidenses.

Ante la difícil coyuntura actual, las criptomonedas, que a finales del 2021 sus detractores dieron por amortizadas tras su brusca caída, han vuelto a la palestra como una forma viable de invertir, ahorrar en tiempos de incertidumbre o simplemente como vehículo de operaciones financieras como el envío de remesas.

Las mil caras de las criptomonedas

Las criptomonedas son uno de los activos más polifacéticos que existen en el ecosistema económico; puede por ejemplo hacerse trading de criptomonedas aunque, eso sí, teniendo en cuenta el riesgo del apalancamiento, se pueden minar con gran provecho si se cuenta o bien con energía barata o bien el precio de la criptomoneda minada es tan alto que justifica el gasto en equipos informáticos y electricidad, se pueden comprar y acumular y especular con ellas e incluso se pueden utilizar para el objetivo para el cual nacieron, es decir, como dinero con el cual enviar pagos a proveedores o incluso familiares.

Además, se puede aceptar como remuneración por servicios de todo tipo ofrecidos a cualquier parte del mundo, al fin y al cabo los medios telemáticos abren el mundo entero para profesionales de todo el globo.

Adicionalmente, incluso se especula con que la nomenklatura rusa y la oligarquía cercana a la misma podría querer usar las criptomonedas para esquivar o protegerse en parte de lo peor de las sanciones, dado que los depósitos en euros y en dólares de las que dispone Rusia en el extranjero se han visto congelados. Esto es algo que no sorprendería tanto si no fuera por la feroz oposición del Estado ruso hacia las criptomonedas, precisamente por ser un elemento casi incontrolable, la misma característica que ahora podría ser una vía para esquivar las sanciones.

Otro factor que podría favorecer a las criptomonedas es la caída de la cotización del euro y de la libra esterlina, ya que si la divisa, reserva de valor por excelencia de la mayoría de los ciudadanos, pierde valor de forma cada vez más acelerada -en términos interanuales el 2021 terminó con una inflación media del 5,3 por ciento para la Unión Europea y de un 5 por ciento para la eurozona, y en los dos primeros meses este indicador ha aumentado incluso más- se vuelve más atractiva la opción de cambiarla por otros activos, como pueden ser Bitcoin o Ethereum.

Hay que destacar que pese a la actual cotización del euro o de la libra, el riesgo de invertir en criptomonedas sigue siendo muy alto, al menos siempre que no se trate de stablecoins, las cuales están vinculadas al precio de una o varias monedas fiat, pero cuando la incertidumbre alcanza a prácticamente todos los mercados asumir ciertos riesgos puede ser más aceptable para cierto tipo de inversores.

En cualquier caso, la guerra y sus consecuencias, las cuales se pueden extender durante meses o años después del fin de la violencia, obligarán a replantearse los análisis sobre las criptomonedas y su evolución durante el 2022, dado que es muy improbable que ninguno de ellos, por concienzudo que haya sido, hubiera incorporado una guerra entre Estados a una escala semejante a la que se está viviendo.

- Publicidad -

Posts relacionados

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

- Publicidad -

Lo más reciente

- Publicidad -