El 2022 se prepara para convertirse en el año más problemático en cuanto a los rendimientos obtenidos por los inversores. Estando a mitad de año, lo peor está por venir para los mercados crediticios en Estados Unidos. Esto es lo que opinan los inversores en una reciente encuesta de MLIV Pulse.
Los inversores comienzan a culpar a la Reserva Federal por los recientes problemas y su tardía respuesta al aumento de la inflación. Tres cuartos de los inversores que respondieron la encuesta de MLIV Pulse, se preocupan por la FED. Los inversores dijeron que una política monetaria restrictiva es el mayor reto que enfrentan los mercados de deuda corporativa.
Puedes seguir el canal de Telegram KEY ALERTS para estar informado sobre las últimas novedades de Bitcoin, Blockchain, Metaverso e inversiones. ¡La información es poder!
La crisis en los mercados crediticios de Estados Unidos
Los inversores de renta fija no habían reportado semejantes pérdidas desde 1970. El sabor agridulce todavía no escapa de la boca de los inversores. Muchos afirman que lo peor todavía está por venir y que esto podría ser solamente el comienzo de una situación más crítica.
Aunque tres cuartas partes de los inversores encuestados esperan que los rendimientos de este año se amplíen a nuevos máximos, sobre los bonos del Tesoro aumenten. También les preocupa el diferencial, puesto que la compensación adicional recibida por el riesgo de la inversión se podría mantener muy por debajo. Incluso a niveles inferiores de los vistos durante los inicios de la pandemia de Covid-19 en el 2020.
Kurt Daum, gerente senior de cartera de USAA Investments explica: «Definitivamente, hay muchas más desventajas, o riesgos, en ampliar desde donde estamos ahora».
Durante este año, los rendimientos de los bonos corporativos sobre los bonos del Tesoro han aumentado. Esto gracias a las oleadas de ventas que han ocurrido durante todo el año a través de los mercados de renta fija. El diferencial sobre la deuda corporativa con grado de inversión llegó a los 160 puntos básicos en el mes de julio, para luego retroceder levemente, según la data recolectada por Bloomberg.
¿Qué opinan los inversores?
Los inversores confían en que el mercado evitará el estrés que vivió durante la crisis del 2007-2009, cuando los rendimientos de los bonos de inversión aumentaron 600 puntos por encima de los bonos del Tesoro. Esto ocurrió de nuevo en marzo del 2020, cuando la brecha alcanzó los 400 puntos y obligó a la FED a intervenir. De esta manera, garantizaba que la falta de crédito disponible no causara otro golpe a la economía similar al del 2007.
Aunque el panorama no parezca favorable, las sólidas posiciones de las empresas son tranquilizantes para los inversores. Tras los estímulos recibidos durante la pandemia de Covid-19 y además unas tasas de interés muy bajas durante dos años favorecieron al mercado. Por otra parte, el Departamento del Trabajo de Estados Unidos anunció crecimientos en la cantidad de empleos creados inesperados.
Cerca del 86% de los encuestados opinan que la posición de las empresas es favorecedora para evitar el riesgo de una situación como la del 2008. Esto gracias a que muchas de las grandes empresas refinanciaron su deuda luego de la reducción de las tasas de interés en el 2020.
Casi la mitad de los encuestados esperan que las acciones superen a la deuda corporativa. Al mismo tiempo que casi un tercio prefiere la deuda de inversión, casi el doble de lo que esperan mejores ganancias de los bonos basura. Esto significaría una ruptura de la tendencia donde, en lo que va de año, los bonos basura tuvieron un rendimiento debido a sus vencimientos más cortos.
Concluyendo
La madurez de los mercados crediticios parece haber aumentado, según Daum, quien declara: «El mercado de alto rendimiento se ha vuelto mucho más de alta calidad, con bonos BB más sensibles a las tasas de interés, en los últimos tres o cuatro años». Pero, debido a esto, destaca: «El impacto de la tasa va a ser más pronunciado en el alto rendimiento de lo que ha sido históricamente».
Adicionalmente, la mayoría de los participantes espera que las fusiones y adquisiciones se mantengan bajas durante el resto del año. El 60% espera que la situación de incumplimiento con los bonos extranjeros chinos no disminuya hasta 2023. Esto ha generado contratiempos al mercado mundial y especialmente el de China, tras una crisis de deuda en la nación asiática.
El mercado crediticio parece no tener buenos augurios, sin embargo, podríamos ver una pronta recuperación si la situación no sigue empeorando. Esta recuperación dependerá de varios factores como el aumento de la tasa de interés y de eventos internacionales como la crisis inmobiliaria de China.