En pleno 2023, el mercado del oro ha ganado «notoriedad», tomando en cuenta la preferencia por el refugio que su valor representa en momentos de crisis. Un grupo reducido de países poseen la mayoría del oro, usando la «posición privilegiada» del activo para fortalecer sus fondos nacionales.
La inflación y las tensiones geopolíticas han «contribuido» al fortalecimiento de su precio, volviéndolo un activo de fuerte interés para las naciones.
Concentración de tenencias
A medida que transcurrían los años, se iba denotando un patrón particular en cuanto a los balances de toneladas de oro. La posesión del preciado metal se ha distribuido en grandes porciones para pocos países, mientras que un porcentaje inferior de las toneladas en existencia estaría repartido entre un grupo mucho más amplio de países.
Las naciones que lideran la lista de concentración de tenencias se han caracterizado por emplear pocas ventas de las mismas. Esto, mientras que, por el contrario, procuran expandir su reserva. El flujo comercial del oro adquirió un trayecto que reunió más toneladas en un grupo reducido de compradores.
Con base en ello, encontramos el «liderazgo» de la lista, con Estados Unidos a la cabeza del top (8.134 toneladas). Los otros 3 países que le siguen son Alemania, Italia y Francia, con reservas de 3.355, 2.452 y 2.437 toneladas respectivamente.
Parte de esa «mayoría del oro» concentrada entre el pequeño grupo pertenece al Fondo Monetario Internacional (FMI), con un balance de 2.814 toneladas. Dichas cantidades fueron «complementadas» por las ventas provenientes de otros países. Tal es el caso de Venezuela y Uruguay, que redujeron sus tenencias en intercambios internacionales.
Esto no significa que el «top 5» fueran los únicos compradores, ya que, durante el 2022, los bancos centrales aumentaron sus reservas.
Revalorización del activo
La situación actual del mercado del oro es «dinámica», desde el punto de vista de las expectativas encontradas. Se tiene en mente un escenario de «superación» de su valor, considerando los picos que el metal ha tenido en su precio.
Mientras que la mayoría del oro sigue concentrada en los mismos lugares, existen inclinaciones por el alza del metal. Las trabas económicas provenientes de factores como la inflación y las tensiones geopolíticas han influido en el incremento de la preferencia por el oro.
Máximos del precio, superiores a los $2.000 por onza, han llamado la atención de los inversores. Al mismo tiempo, ellos intentan alejarse de los riesgos de los movimientos «flojos» en el fortalecimiento de otros activos como las acciones bursátiles. Esto, incluyendo el golpe inflacionista que contrarresta el valor del USD y otras divisas.
De las 35.370 toneladas registradas en la actualidad, 19.191 pertenecen al top 5 antes mencionado. Por otro lado, está «entre dudas» la posición que tienen China y Rusia, ya que su postura ha sido la de expandir sus tenencias «formidablemente». Lo que está claro es que han conseguido entrar al top 10, con una Rusia que utiliza activamente su reserva para compensar las sanciones económicas que afronta actualmente.